One day I was talking to Trent and Mitchell during one of our monthly meetings. I was complaining about my singleness, saying “These days people talk to singles like it’s their fault they’re single” Then Trent said “You know, our situation is different”. It was something simple but it brought me back to the real world. “You know, our situation is different.” I had been comparing myself to something that doesn’t apply to my life.

As women, we read in the bible about our role in the home. So you assume wrongfully that your life begins when your home begins. But being in my early 30s, single and dealing with pedophilia at the same time make things different. When I understood that I was different, and therefore my life in certain ways was going to be different, I felt calm.

It hurts to rarely or never read about my particular situation. I am dealing with something that almost no one talks about. The other day I was reading about jobs that single women can do. Guess what it says; “babysitting.” “Helps practice your nurturing nature.”

I understand; no one would advise the 96% with tips that would only apply to 4% of the population. My nature is broken by sin in an unusual way. I didn’t ask for this, but I can’t get rid of it either. “Do not carry children in church, do not look them in the eye, avoid them on the street.” These are the rules I try to live by. Many people would think that I hate children, and I’m going to be honest – I don’t feel a great calling to take care of other people’s children. But I feel tenderness towards them in me like any other person.

Sometimes we forget that suffering is part of being alive, and that crying and mourning is natural. And oh! it brings us closer to God. While we are here, sin is going to make us suffer.

“These things I have spoken to you so that in me you may have peace. In the world you will have affliction; but trust, I have overcome the world.” John 16:33

Many times all you will be able to do is cry, and God will comfort you. As people who suffer from pedophilia, our lives will be different from other people when it comes to children. Knowing this will teach you that love is also manifested in how we deal with sin. Many people are going to love children by playing with them or making silly faces at them. You are going to love them from knowledge by respecting them, and if you have to go away from where they are, then so be it. God knows, and that is what matters. And if we’re going to cry then let’s cry. God is with us.

La excepción tiene un lugar en el reino de Dios

Un día estaba hablando con Trent y Mitchell durante una de nuestras reuniones mensuales. Me quejaba de mi soltería y decía: “En estos días, la gente habla de los solteros como si fuera su culpa que estén solteros”. Entonces Trent dijo: “Sabes, nuestra situación es diferente”. Era algo simple, pero me trajo de vuelta al mundo real. “Sabes, nuestra situación es diferente”. Me había estado comparando con algo que no se aplica a mi vida.

Como mujeres, leemos en la Biblia acerca de nuestro papel en el hogar. Entonces asumes erróneamente que tu vida comienza cuando tu hogar comienza. Pero estar en tus 30s, soltera y lidiar con la pedofilia al mismo tiempo hace que las cosas sean diferentes. Cuando entendí que yo era diferente, y por lo tanto mi vida en cierto modo iba a ser diferente, me sentí tranquila.

Me duele nunca o rara vez leer sobre mi situación particular. Estoy lidiando con algo de lo que casi nadie habla. El otro día estaba leyendo sobre trabajos que pueden hacer las mujeres solteras. Adivina lo que dice; “cuidado de niños”. “Ayuda a practicar tu instinto natural”.

Entiendo; nadie aconsejaría al 96% con consejos que solo se aplicarían al 4% de la población. Mi naturaleza está quebrantada por el pecado de una manera inusual. No pedí esto, pero tampoco puedo deshacerme de él. “No cargar niños en la iglesia, no mirarlos a los ojos, evitarlos en la calle”. Estas son las reglas que trato de seguir. Mucha gente pensaría que odio a los niños, y voy a ser honesta: no siento una gran vocación para cuidar de los niños de otras personas. Pero siento ternura hacia ellos en mí como cualquier otra persona.

A veces olvidamos que el sufrimiento es parte de estar vivo, y que el llanto y el duelo es natural. y ¡ay! nos acerca a Dios. Mientras estemos aquí, el pecado nos va a hacer sufrir.

“Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.” Juan 16:33

Muchas veces lo único que podrás hacer es llorar y Dios te consolará. Como personas que sufren de pedofilia, nuestras vidas serán diferentes a las de otras personas cuando se trata de niños. Saber esto te enseñará que el amor también se manifiesta en la forma en que lidiamos con el pecado. Mucha gente va a amar a los niños jugando con ellos o haciéndoles muecas tontas. Tu los vas a querer desde el conocimiento respetándolos, y si tienes que irte de donde están, que así sea. Dios lo sabe, y eso es lo que importa. Y si vamos a llorar, lloremos. Dios está con nosotros.